Esto ocurrió hace unos cuantos años en un club de maspalomas, que desgraciadamente ya no existe y donde nos habíamos citado con un buen amigo, el cual en unos dias se trasladaba de isla por motivos laborales, así que, ¿ que mejor manera de despedirnos, que pasar una buena tarde- noche de sexo en el citado club liberal?.
Estuvimos jugando largo rato los dos con ella, tanto en el yacuzzy como fuera de él, pero estando en un privado con puerta cerrada, me dice nuestro amigo si era posible dejarlo a solas con mi chica, a lo cual yo, que soy muy morboso y teniendo en cuenta que no sabríamos cuando volveríamos a verlo, asentí sin dudar, así que abandoné dicho privado y cerré la puerta, dejando tras de ella a mi pareja con el susodicho. A la salida de la habitacíon habían unas colchonetas a modo de cama y yo me senté en la primera mirando de frente la puerta del reservado, desnudo, esperando que ellos acabaran, pero cual fue mi sorpresa que al rato oigo a mi chica gimiendo y gritando de placer, notando como mi miembro subía y subía a cada grito de ella y yo sentia una exctación brutal sin nisiquiera tocarme. Al rato ella para de gritar y mi miembro cual aútomata vuelve a bajar, así que yo para mis adentros decía "hazla gritar", "hazla gritar" y oh milagro ella vuelve a invadir la estancia con sus gritos y mi poya de nuevo para arriba, yo teniá ganas de tocarme pero al mismo tiempo me decía no te toques que te vas a correr y se acaba tu placer, así que olvidé ese pensamiento y segui disfrutando con la poya tiesa a punto de reventar.
Al cabo de un rato, ellos terminaron y salieron a buscarme, estuvimos un rato más y ya nos despedimos, sin saber si esa sería la ultima vez que lo volveríamos a ver, pero si lees esto, que sepas que ese rato que no estuve presente con ustedes fue uno de los mas excitantes de mi vida y lo recuerdo muchas veces, gracias por tan buenos ratos pasados junto a ti, AMIGO