* hola mi puta, date una ducha y ponte el conjunto rojo, a las 19:00 quiero que dejes la puerta entreabierta y te tumbes boca arriba en la cama y esperes.*
Así lo hice, a las 7 de la tarde ya estaba preparada y acostada en la cama como me había ordenado mi marido, entonces oí pasos que se acercaban a la habitación, apareció en la puerta frente a mí un chico mas o menos de mi edad negro fuertote, alto y guapo. Desde que lo vi pensé
-Que bien me conoce mi marido -
Lo miré y le sonreí, ahí estaba yo, acostada esperando que ese machote se acercara a mí, entonces mientras caminaba hacia la cama me dijo que me diera la vuelta, llegó hasta mí y comenzó a meter sus manos fuertes por debajo del picardías rojo tocándome la espalda a modo de masaje, poco a poco fue bajando las manos hasta mis nalgas, me las apretaba, manoseaba y hasta mordía me estaba acariciando y me estaba excitando mucho, pero no entendía por qué no llegaba a desnudarme, entonces oí como se cerraba la puerta y me sobresalte, no esperaba a nadie más
- dejaste la puerta abierta?-
le pregunte al negro
Cuando me iba a levantar para comprobar quien había entrado apareció mi marido y a mí la sonrisa me llegó de oreja a oreja, me levanté y lo abracé
- sorpresa!!, hola pequeña, quiero disfrutarlo contigo-
Cuando me di la vuelta el negro ya estaba desnudo y acostado en la cama,
- madre del amor hermoso mi niño, todo eso es para mi sola??-
Mi marido me hizo una señal de que fuera a chuparsela, me subí a la cama y me metí la polla del negro en la boca, . Aunque era demasiado grande y no me cabía, al menos lo intentaba...
Entonces noté como se hundía la cama detrás de mi, ya mi marido estaba desnudo y preparado para follarme, entonces me metió la polla y le dije
- cuanto te he echado de menos mi amo -
Mientras yo le chupaba la polla al negro mi marido me follaba como él sabe que me gusta, se recostó sobre mi, me abrazo y me dijo al oído
- hoy serás una buena puta y recibirás dos pollas -
No se si él lo notó, pero desde que me dijo eso mi coño empezó a palpitar. Estaba tan contenta de que mi marido hubiera hecho el esfuerzo para compartir ese momento conmigo que me daba igual todo.
Le dio un preservativo al negro y le dijo que fuera al sillón y se sentara en el borde, se puso el preservativo y me senté sobre él, dios que polla tan grande tenía el cabrón... Me movi durante un rato sobre el negro mientras mi marido rebuscaba en su mochila. Una vez que econtro el lubricate vino a donde estábamos nosotros, dejó el bote en la mesita y se puso detrás de mi, sentí una presión que no era normal en mi coño, el muy ... Quería hacer la doble por delante, así que me incline para darle un mejor acceso a mi coño y finalmente lo consiguió, tenia dos pollas en mi coño, solo pensaba como era posible y que placer me están dando, el negro la tenia enorme y mi marido tambien está bien dotado. Tenía para mi sola esos dos pollones a mi disposición, después de un rato, mi marido salio y cogió el lubricante, era el momento de reventarme el culito.
Me untó lubricante y se puso en la polla también, entonces pidió al negro que parase de moverse para poder acceder, poco a poco fue haciendo presión hasta que consiguio meter la cabeza, no era la primera vez que mi marido me follaba el culo, sabe que en ese momento tiene que parar y dejarme moverme a mi, una vez se me acostumbro el agujero empecé a moverme hacia atrás metiendo la polla de mi marido por el culo abriéndome las nalgas con las manos hasta que entró toda, pero en ese momento hay que quedarse quietos un ratito para que se acostumbre el agujero a la invasion
( Si pudieras meter la mano en mi coño ahora mismo notarias las contracciones vaginales que estoy teniendo mientras escribo este relato, no veo la hora de terminar de escribirlo para poder masturbarme )
Después de ese momento me sentía super llena, ellos empezaron a moverse mientras el negro me comía las tetas y mi marido me daba nalgadas y me ponía las nalgas rojas, baje una mano hasta mi clítoris y con el placer de las dos pollas dentro de mi y más sabiendo que mi marido estaba allí conmigo me llegó un orgasmo que me aflojo todo el cuerpo, al poco mi marido le dijo al negro que saliera, me puso de rodillas en el suelo y me metió la polla en la boca mientras el negro se incorporaba y se quitaba el reservativo para ponerse al lado de mi marido, les cogí las dos pollas y junte sus cabezas para intentar metermelas en la boca juntas, no pude, pero era exitante estregarles las pollas mientras se las lamía a los dos a la vez, entonces alternando mamada y paja a cada uno cada vez comencé a tocarles una paja a los dos y los miraba mientras esperaba la leche, primero se corrió el negro y al momento mi marido, seguí tocandolos mientras me echaban la leche los dos a la vez en la cara y la boca.
Una vez terminamos y el negro se fue, mi marido y yo nos duchamos juntos y dentro de la ducha hicimos el amor como nunca antes. Me agarró en brazos y me apoyó contra la pared mientras introducía su polla dentro de mi, yo me agarraba a su cuello y rodeaba su cintura con mis piernas mientras se movía y me levantaba por las nalgas, la ducha era grande, así que conmigo aún enganchada a su cintura se puso de rodillas y apoyo mi espalda en el suelo, mis piernas pasaron de su cintura a sus hombros, en esa posición era para mi más fácil el acceso de mi mano en mi clítoris, así que empecé a masturbarme mientras él no paraba de penetrarme mientras nos caía el agua calentita encima, no tardé mucho en alcanzar un orgasmo que creo que se enteraron hasta en la recepción, mi marido aprovechó para correrse al tiempo mío mientras tenia esas contracciones vaginales debido al placer de mi orgasmo, agotados nos enjabonamos el uno al otro y salimos de la ducha, nos metimos en la cama y sin decir una palabra simplemente nos dormimos abrazados.
A la mañana siguiente nos despertamos a media mañana, ya había pasado la hora del desayuno, pero no me importó, me desperté yo primero y estuve un rato mirando a mi marido dormido, no pude aguantar más y me metí bajo las sabanas para meterme la polla en la boca, se suponía que él estaba durmiendo, pero su polla ya estaba despertando, no paré de chuparsela hasta que escuche
- Buenos días reina mía, hacía mucho que no me despertabas de esta forma, que rico -
Me saque la polla ya más que dura y le dije
- buenos días mi amo, por tu culpa me quede sin el desayuno y tengo hambre, así que te comeré a ti -
Disfruté de la mamada durante un buen rato y entonces mi marido se levantó y así mismo como estaba se puso detrás de mi y me penetro, sabe que me encanta esa postura, él se movía, yo me movía, nos movíamos al unísono, hasta que metiendo la mano entre mis piernas para buscar mi orgasmo, mi marido me agarró por la cintura y me dió la vuelta, me abrió las piernas y comenzó a comerme
-Pues yo también me levante con hambre mi reina, te voy a desayunar -
Que lengua tiene, como me conoce, en cuestión de minutos me arranco un orgasmo que le deje toda la boca empapada.
Se acosto en la cama y me puse arriba, le agarre la polla y me la metí, me movía arriba y abajo agarrándome del cabecero de la cama mientras él me agarraba y apretujaba las tetas, entonces me recoste sobre él y me puse en una postura que le puede, no soporta cuando me inclino hacia adelante y comienzo a mover las caderas arriba y abajo con buen ritmo, así que agarrándome las nalgas él mismo fue quien llevaba el ritmo buscando su placer, ahí llegó, comenzo a correrse y a llenarme de leche, como me encantan estos desayunos ricos ricos, después nos duchamos y recogimos las cosas, ya tenia que dejar la habitación, así que mientras él llevaba las cosas al coche, yo fui a entregar las llaves a recepción, fuimos a comer a un restauante y después al barco, pasamos por casa de mis padres, recogimos a los niños y de vuelta a la rutina.
yanira85 | 02/07/2025 19:11
Muchísimas gracias, espero seguir así con todos los que publique 🥰🥰