No vendo cursos, no soy coach, ni tengo frases motivadoras tatuadas.
Me gustan las risas sin filtros, las miradas que hablan y las personas que no se toman tan en serio.
Soy de los que cocinan con música, besan con ganas y se ríen en los momentos incómodos.
No busco a alguien perfecta, solo real.
Si tienes conversación, actitud y un poquito de malicia, ya llevas ventaja.
No prometo el cielo, pero sí buenas charlas, mejor compañía y si se da, lo que se tenga que dar.
¿Te atreves